Cristo es el camino y la puerta. Cristo es la escalera y el vehículo. Es el propiciatorio colocado sobre el arca de Dios. Es "el misterio escondido desde siglos"
(San Buenaventura)

9.12.10

Inmaculada Concepción de María


Santo Tomás enseña que lo que se consagra totalmente a Dios debe ser santo y libre de toda mancha. ¿Y qué criatura humana ha sido consagrada más perfectamente a Dios que la Virgen María? El rey David decía que un templo no se destina para los seres humanos solamente, sino sobretodo para Dios (1 Crónicas 29) y así también el Creador que formó a la Santísima Virgen con un fin principal: ser Madre de su Santísimo, seguramente adornó su alma con los más bellos adornos, y entre todos, el mejor: el estar libre de toda mancha de pecado, para que fuera digna morada donde iba a vivir nueve meses el Salvador del mundo.Santo Tomás llama a María: "Sagrario del Espíritu Santo". Varios santos la llaman "Templo del Espíritu Santo". Pues bien, el Espíritu Santo estaría más contento y más satisfecho si el Sagrario o el templo donde iba a habitar era totalmente libre de toda mancha de pecado. Por eso Dios libró a María de toda mancha pecaminosa. La Iglesia celebra también el 8 de septiembre la fiesta del nacimiento de la Virgen María. Santo Tomás enseña que la Iglesia católica no acostumbra celebrar el nacimiento de sus santos, pero que a María sí le celebra el nacimiento porque Ella fue totalmente santa ya desde antes de nacer (Summa. T. 3, q. 27 a 1).
Extraído de Jesús en María